La opción perfecta para cambiar el aspecto de tu look de una forma sustancial sin tener que renunciar a tu melena ni al corte que lleves es, sin duda, el flequillo.
Largos, cortos, rectos, de tipo cortina... los flequillos son perfectos para dar un cambio notorio a tu aspecto sin mucho sacrificio y sin tener que renunciar a una melena larga.
Hoy, en Bekia Belleza, te contamos algunos trucos para que descubras cuál te sienta mejor.
Distintos tipos de flequillo para distinto tipo de rostro
El flequillo recto es uno de los que están más de moda. Fue absoluta tendencia hace unos años pero a día de hoy sigue estando presente entre nosotras y es uno de los más demandados. Queda muy bien en cualquier tipo de melena, sea larga o corta, pero es en los rostro ovalados donde mejor sienta. A las caras redondas, por lo general, no les suele quedar bien pero si tienes una frente prominente, te sentará a las mil maravillas. Si optas por este tipo de flequillo has de tener en cuenta que debe ser opaco y abundante por completo para que cubra la frente con totalidad. Por eso, se recomienda en quienes tengan mayor cantidad de pelo. Si este no es tu caso puedes decantarte por el flequillo recto pero cortándolo de forma asimétrica por los lados.
El flequillo curvado da un toque muy romántico al look pero ocurre como con el anterior; para que quede bonito debe ser abundante. Este flequillo, sin embargo, no es totalmente recto, sino que está desfilado en cierta medida y desestructurado pero siempre estará igualado a ambos lados de la cara y sin picos. Funciona muy bien para las mujeres de rostros ovalados y alargados, ya que se consigue redondear las facciones. Si tu cara es más bien redonda, descártalo.
Por su parte, el flequillo abierto es ideal para quienes tienen la nariz ancha o la cara redonda aunque funciona bien en casi todos los tipos de rostro. Quedará mejor aún si lo combinas con una melena de largo medio y con el famoso corte bob. Este tipo de peinado va separado en el centro de la frente, con raya en medio, un poco largo, recto a los lados y acabado en punta.
Por último, el flequillo tipo cortina o lateral es el que marca tendencia este año 2012. Queda perfecto para una melena ondulada aunque es adaptable a cualquier otra. Una de las ventajas principales es que es muy cómodo ya que no es necesario que cuando crezca, vuelvas a la peluquería a retocarlo o cortarlo. Este tipo de flequillo si crece queda igual de bonito. Es ideal para caras triangulares con melena corta. Va desfilado, acaba en pico y se sitúa desplazado hacia uno de los lados del rostro por lo que la raya irá a un lado.
Funciona muy bien para las caras aniñadas ya que les aporta personalidad y también para quienes tienen las facciones alargadas ya que las acorta y proporciona equilibrio, pero si tienes la cara redonda, no es la mejor opción. Si optas por este tipo de flequillo prueba a qué lado de la cara te favorece más ya que no la tenemos simétrica y siempre hay un lado mejor que otro. Coloca tu flequillo en el que menos te guste que será el que se oculte más.
En definitiva, si tienes la cara redonda evita el flequillo recto y opta por uno a capas ligeramente largo que caiga sobre las cejas y puedas colocarlo detrás de las orejas. Si tienes el rostro alargado te sienta bien cualquier tipo de flequillo pero lo ideal es buscar el equilibrio, por eso, lo mejor son los flequillos rectos a la altura de las cejas, nunca más cortos. Puedes inclinarlo hacia un lado sutilmente. Para una cara triangular lo ideal es un flequillo largo con raya en medio y uno recto inclinado hacia un lado para los rostros cuadrado o angulosos. Por último, si tienes las facciones ovaladas estás de suerte, ¡todo te sienta bien!